Historias en el olvido
- Trans(verso)
- 4 may 2023
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 18 may 2023
La Feria del Libro en Castelló, en deuda con novelas históricas como la de Florencio, conocida como La Pastora

La Plaça Hort dels Corders de Castelló se viste con palabras para incentivar la lectura entre los asistentes o personas que están ahí de paso. Con un total de veinte expositores, librerías de la ciudad e instituciones como la Diputació de Catelló o la Universitat Jaume I acumulan montañas de libros en sus puestos. Pocas personas se paran a observar, de hecho, la mayoría se encuentran en las sillas de los bares de alrededor, tomándose una cerveza; otra parte de la gente se distribuye entre las sillas delante de un escenario donde están haciendo una charla sobre novelas negras.
Las lecturas en castellano predominan sobre las escritas en valenciano. Los libros de niños se encuentran apartados en un puesto específico. Las lecturas sobre amor romántico destacan entre las lecturas de amor no convencional. Faltan libros con contenido LGTBI. A primera vista puede parecer directamente que no hay, pero así estaríamos juzgando a un libro por su portada, nunca mejor dicho.
Entre libros y libros se esconde uno con una portada que a primera vista aparenta ser una novela negra. Pero no es exactamente así. Se lee el título: Florencio Pla «La Pastora» (edición en catalán). Si lees el resumen del libro descubrirás que el personaje principal ha existido y no solo eso, sino que ha sido importante dentro del colectivo LGTBI. El personaje de Vallibona (Castelló), ubicado en la época de la Guerra Civil, tenía condición de persona intersexual.
Historias como las de La Pastora se deben contar, pero si se cuentan y no se escuchan, o no se leen, quedan en el olvido. Hay poca gente en la Feria del Libro, y poca gente está mirando los libros que le interesan. Aún menos gente compra libros. Y poca menos gente se identifica con la historia de Florencio Pla. Este personaje, situado ahora mismo en la plaza de l’Hort dels Corders de Castellón, no se hace ver. Su figura no destaca entre los libros de los influencers o los libros sobre cocina.
En cambio, esta novela de Elena Solanas ha provocado que grupos como Ebri Knight y Aina Palmer, le dediquen una canción:
Puede que la cara de La Pastora reflejada en la portada del libro te produzca sentimiento de felicidad porque sale sonriente, pero piensa que nadie contará su historia. Más allá de las canciones y de la novela, que nadie ha visto que estaba allí, no quedará nada sobre ella. La Pastora cambió su vestimenta por qué debía participar con los maquis y eso la obligó a cambiar sus ropas femeninas por las masculinas. Así pasó de llamarse Tresa, Teresot o Teresa a llamarse Florencio.
La Feria del Libro cerrará sus puestos. Los libros volverán a las cajas. Florencio volverá a desaparecer de la vida de algunas personas, o puede ser que de ninguna. Depende de la cantidad de personas que hayan visto su cara en la portada o hayan comprado el libro. La Pastora volverá a convertirse en Florencio y Castellón en la tumba de la lectura y de historias como ésta.
Comments